Hoy, en nuestra sección “El tiempo de…” tenemos con nosotros a José Miguel Viñas, físico de carrera, comunicador, divulgador científico y también escritor. Es consultor de la OMM y trabaja en la actualidad en los proyectos MOMET y PREMIA, ambos en México.
Lo conoceréis si sois escuchantes (como se dice ahí) del programa “No es un día cualquiera”, de Radio Nacional de España, ya que es uno de los colaboradores fijos. Sus preguntas, acertijos “meteorológicos” y curiosidades son ya bien conocidas en el mundo meteorológico. Responsable de la página web www.divulgameteo.es, escribe regularmente artículos, imparte conferencias y cursos por toda España, y ha publicado hasta la fecha seis libros de divulgación científica, que versan sobre cuestiones de lo más diversas relacionadas con el tiempo y el clima. Estos son:
- “¿Estamos cambiando el clima?”, de la editorial Sirius.
- “200 estampas de la temperie”, de la editorial Sirius, libro referencia en cuanto a imágenes de meteoros y su explicación.
- “Introducción a la Meteorología. La ciencia del tiempo”, de la editorial Almuzara.
- “Curiosidades meteorológicas”, de Alianza Editorial.
- “Preguntas al aire”, de Alianza Editorial.
- “El universo meteorológico. Un científico en las nubes”, de la colección “Descubrir la ciencia”, nº 9. 2016). De ahora mismito…
Pues bien, aquí tenemos la pequeña entrevista que nos ha concedido. Como siempre, con ella pretendemos que el lector descubra algo más del personaje y, lo más importante, sin entrar en largas y densas conversaciones.
1- ¿Cuál es el primer recuerdo “meteorológico” que tiene?.
El primer recuerdo es una fortísima tormenta que hubo en Madrid hacia el año 1976-77, estimo (yo debía tener unos 7-8 años). Se desencadenó de noche, y coincidió que mi padre estaba fuera, de viaje. En mi casa estábamos mi madre y yo. Ella se asustó muchísimo por la violencia que adquirió el viento. Se llegó a reventar uno de los tambores de las persianas de casa. La luz también se fue. Luego recuerdo que cuando llegó mi padre a casa, esa misma noche, nos comentó que le pilló conduciendo una brutal granizada, en la que vio caer trozos amorfos de hielo de gran tamaño. Fue en verano. Es un recuerdo algo confuso en las fechas, pero nítido en lo que recuerdo que pasó.
2- ¿En qué ocasión concreta ha pensado “madre mía, la que me va a caer”, cuando vio la evolución real del tiempo, con respecto al pronóstico realizado?. ¿En qué fecha fue?.
No recuerdo una situación concreta, sino varias de ellas. Por ejemplo, cuando el radar muestra alguna línea de turbonada severa acercarse a Madrid (mi lugar de residencia), y tengo ocasión de comprobar in situ su impacto.3- ¿Cree que los modelos matemáticos de predicción atmosférica tienen aún mucho camino por recorrer, en cuanto a fiabilidad, o hay cosas que nunca podrán predecirse del todo?.
Todavía hay un amplio margen de mejora, principalmente en lo que se refiere a la microescala y mesoescala. Siempre habrá límites, pero si la potencia de cálculo sigue aumentando, como es previsible, el nivel de detalle que podrán mostrar los modelos seguirá aumentando. A pesar de ello, creo que el predictor experimentado y con un profundo conocimiento de la modelización siempre podrá ofrecer un valor añadido.
4- ¿Qué localidad, zona o región del mundo le gustaría visitar una temporada, para poder disfrutar de su especial “tiempo”?
Las regiones polares, tanto por la meteorología como por sus paisajes. Me apasionan los fenómenos ópticos, muy abundantes allí. Me gustaría tener la oportunidad de disfrutar del espectáculos de las auroras polares. Tampoco me importaría darme una vuelta por el Corredor de los tornados de EEUU y tener la oportunidad de ver con mis propios ojos uno de esos peligrosos remolinos en acción.
5- Recomiéndenos una película o un libro (o las dos cosas) de índole meteorológica.
Como película “La tormenta perfecta”, del año 2000, protagonizada por George Clooney y basada en hechos reales.
Como libro, hay bastantes que contienen bellas descripciones meteorológicas. El novelista cántabro José María Pereda nos regaló preciosos pasajes en sus obras “Peñas arriba” (1895) y “Sotileza” (1885). También Verne en algunas de sus novelas más conocidas se recrea en las descripciones de los paisajes atmosféricos. Hace unos años publiqué un artículo sobre el particular. Os dejo aquí el enlace: http://www.divulgameteo.es/uploads/Verne-Meteorología.pdf
Como siempre, nuestro agradecimiento a José Miguel por perder un poco de su tiempo para esta sección.
Nos vemos pronto.